En busca de reducir los precios, el Gobierno oficializó finalmente la quita de los aranceles para la importación de productos informáticos, medida anunciada el año pasado y que generó críticas de fabricantes locales y sindicatos.

El decreto abarca la importación tanto de computadoras portátiles como accesorios informáticos y de telecomunicaciones que quedarán exentos del pago de derecho de importación.

A través del Decreto 117/2017, publicado en el Boletín Oficial, se formalizó la medida en cuyos considerandos se justifica que «redundará en la disminución de los costos de fabricación de diversos aparatos y equipos electrónicos, mejorando las condiciones de competitividad y productividad, y contribuyendo al aumento de la inversión productiva en el sector y de su disponibilidad en el mercado local».

Establece que eliminará desde mañana el arancel de 12% promedio para la importación de componentes para producir computadoras en el país, como también el arancel de 35% para la importación de notebooks, tablets y computadoras a partir del 1 de abril.

La medida se enmarca en las excepciones que tienen los países miembros del Mercosur para reducir los aranceles a diversos bienes, entre ellos los relacionados a tecnología.

La eliminación del arancel del 35%, prevista a partir de abril, incluye a las computadoras terminadas, notebooks, all in one y PC de escritorio, mientras que en el caso de partes de computadoras alcanza a complementos de informática (impresoras, plotters, digitalizadoras) y otros bienes tecnológicos (servidores, partes de LEDs).

«La posibilidad de acceso a las nuevas tecnologías resulta esencial para el desarrollo económico y social de nuestro país, brindando el marco adecuado para alcanzar una mayor eficiencia en el uso racional de la energía», añade la norma en sus argumentos.

El Gobierno espera que de la eliminación de los aranceles resulte una disminución de los valores en el mercado local que revierta la tendencia en la baja del consumo. Más luego de la aplicación del programa «Precios Transparentes», a través del cual se diferenció el pago al contado del de financiamiento, que provocó el fin de las cuotas sin recargo.

Sin embargo, la medida ya provocó un impacto negativo entre los fabricantes locales que advierten por la supervivencia de la industria. De hecho, a fines de enero la empresa Banghó despidió a casi 200 trabajadores que luego fueron reincorporados aunque como «suspendidos» y con un salario 30% menor.

El secretario de Emprendedores y Pymes, Mariano Mayer, afirmó que la eliminación de aranceles para la importación de computadoras tiene por objetivo «la generación de empleo de calidad, mejorar la competitividad y profundizar el camino de la productividad».

«Esta medida contribuye básicamente a mejorar la productividad y generar empleos de calidad», señaló Mayer a Télam.

En este sentido, añadió que «casi todas las pymes y los emprendedores del país necesitan notebooks y computadoras para trabajar y son quienes generan el 70% del empleo en la Argentina», y agregó: «Las computadoras son un insumo básico para todas las tareas productivas y también para la educación, la investigación y las familias».

El costo de la tecnología afecta «la competitividad de toda la economía y no puede ser una barrera para los cientos de miles de jóvenes emprendedores que desean tener sus propios proyectos, y que deben contar con el apoyo del Estado para realizarlos».

A modo de ejemplo, recordó que «en el sector de software en industrias vinculadas con la economía del conocimiento hay pleno empleo y una gran proyección. En 2016 el empleo del sector creció 8,9% y se crearon 7.000 nuevos puestos de trabajo».

«Al tomar esta decisión pusimos foco, además, en acompañar a los trabajadores en la transición, y quienes resultaron afectados ya están en proceso de ser incorporados a nuevas compañías, que tienen proyectos de inversión sustentables aprobados por el Ministerio de Producción y crearán empleos de calidad, como en el caso de Visuar Samsung», indicó Mayer.

El Programa de Transformación Productiva que «llevamos adelante en conjunto los Ministerios de Trabajo y de Producción busca que los puestos de trabajo del sector serán absorbidos por nichos más competitivos, y tenemos el compromiso de no soltarle la mano a nadie», aseveró el funcionario.

«Según la última encuesta nacional sobre el acceso y uso de las tecnologías de la información y la comunicación realizada por el Indec, el 67% de los hogares tiene acceso a una computadora, mientras que en Chile el nivel de penetración se acerca del 85%», aclaró.